No sabía dónde ponerlo, pero puede encajar aquí porque es una actuación del Consorcio.
Descubren pinturas murales del siglo XVII en una casa de Abdón de PazRepresentan escenas religiosas, como la parábola del Hijo Pródigo y una Virgen con el niño Jesús

Siempre se dice que Toledo esconde tesoros debajo de sus piedras o detrás de sus paredes, y no es un decir. Para muestra, un botón. En los últimos días han salido a la luz unas bellísimas pinturas murales que han aparecido en una vivienda de la planta baja del inmueble de la plaza de Abdón de Paz, número 9.
El descubrimiento se hizo a raíz de que el actual propietario de la vivienda, Isabelo Galán, pidiera ayuda al Consorcio de Toledo para rehabilitarla. El trabajo del servicio de asistencia arqueológica del Ayuntamiento es el que ha sacado a la luz unas pinturas murales en una de las dos habitaciones de la casa. Además, en la otra estancia se han descubierto también unas nacelas con inscripciones con caracteres latinos y en los vanos exteriores, que se abren al patio, dos yeserías, con decoración de candelieri renacentista, que están parcialmente mutiladas.

Gómez Laguna informó de que la configuración del salón donde se encuentran las pinturas se puede remontar a época medieval islámica, con importantes reformas en los siglos XIV y XV, aunque la reforma más importante hay que situarla entre los siglos XVI y XVII. Es en ese contexto en el que se enmarcan estos frescos, cuando el entonces propietario de la casa, una persona pudiente, transformó la estancia en un oratorio o capilla privada de la familia.
La hipótesis de Gómez Laguna es que el propietario de la casa fue una persona que estuvo en otras tierras durante un tiempo (de ahí la escena de la parábola del Hijo Pródigo), incluso en América. Las pruebas estarían en algunos detalles de animales y seres fantásticos y mitológicos presentes en las yeserías y en los canecillos del patio, únicos en todo Toledo.